Es importante saber distinguir y poner atención a algunas señales que anuncian que la nueva mamá está atravesando una depresión para atenderla lo más rápido y adecuadamente posible por un profesional.
A continuación se enlistan algunas señales.
- Sentirse muy triste
- Tienes mejor humor solo por las noches.
- Tienes ganas de llorar todos los días, de manera continua y frente a cualquier adversidad.
- No tienes apetito.
- Estás muy cansada.
- Te cuesta concentrarte incluso ante casos sencillos.
- No tienes ganas de hacer nada.
- Crees haber perdido el interés por el futuro.
- Tomar cualquier desición te pesa.
- No te sientes útil en ningún sentido.
- No tienes confianza en tí misma.
- La memoria no funciona tan bien como antes.
- Tienes la sensación de tomar desiciones equivocadas todo el tiempo.
- La vida te parece dificil y monótona.
- Tienes mala digestión.
- Prefieres estar todo el tiempo dormida o bien duermes muy mal, inquieta y con pesadillas.
- Nada de lo que te rodea te parece interesante.
- Sueles estar irritable y muy nerviosa.
- Temes que tú o tu hijo enfermen fácilmente.
- Tienes miedo de lo que está sucediendo, por ejemplo aparición de fobias que antes no tenías.
- No tienes cuidado de tu propia persona. pierdes interés por arreglarte o verte bien.
- Sientes que eres un peso para los demás.
- Tienes la impresión de que no conseguirá superar la etapa del embarazo con éxito, que no recuperarás tu peso, etc.
- Te preguntas.... ¿que hago? constantemente.
Si tienes la mayoría o todas estas sensaciones de una forma intensa y persistente, debes pedir ayuda al médico que sabrá ayudarte a afrontar la situación de la mejor manera.
Si por el contrario solo tienes algunos sintomas de forma leve se trata de un trastorno pasajero, que debe ser considerado normal los últimos meses de embarazo, en este periodo la sensibilidad de la mamá está muy acentuada, por cuestiones que dependen tanto del flujo hormonal como de un componente tipicamente psicológico.
Revista Mi Bebé y Yo, año 11, no.126
Desafortunadamente yo viví esta experiencia, y tuve que llevar un tratamiento antidepresivo por cerca de tres meses, en los que me recuperé, poco a poco pero muy bien, con ayuda de mi esposo, y mis papás, esto es algo de lo que todas debemos estar pendientes para que no pase a más, la maternidad es una etapa muy linda pero muy dificil que definitavamente debemos disfrutar y no sufrir.
Apóyate con tu familia y sobre todo siempre busca ayuda profesional, para salir adelante si estás viviendo algo así, no permitas que nadie te diga que es algo que solo está en tu cabeza y que se te va a quitar pues no es así. La depresión es algo que se debe tomar muy en serio.